miércoles, 30 de noviembre de 2016

Que cagada que me mandé.

Hoy me mandé una terrible cagada: escuché una canción de fútbol. Mierda. Las canciones de fútbol siempre tienen el mismo efecto en mí, son como una máquina para viajar en el tiempo que me hacen revivir el pasado. La canción es esta. Me transportó al año noventa y sieto o noventa y ocho, cuando estaba terminando la primaria. En los noventa un peso argentino era un dólar, por lo que recuerdo bastante bien el costo de  algunas cosas, a pesar de que las seguidillas de devalucaiones e inflaciones deforman la noción de los precios. Un paquete de tallarines estaba alrededor de setenta centavos, la caja de puré de tomate estaba cincuenta centavos, la lata de atún, quince, y de oferta las podíamos conseguir a once. Amaba el atún con arroz. También recuerdo que las porciones de torta que hacía con mi mamá a la mañana y vendía a la tarde en la escuela, costaban diez centavos.

domingo, 27 de noviembre de 2016

Había una vez un bosque

Si Bochum tiene algo lindo, son sus fiestas nocturnas en el bosque. Los bosques en Alemania tienen algo especial, algo que no podemos percibir en Argentina, porque la geografía es completamente diferente. Cuando salís de una ciudad argentina, casi siempre te encontrás con campo, o con pastizales, pero casi nunca se pueden encontrar grandes amontonamientos de árboles. Alemania es distinta. Las afueras de las ciudades están hechas de bosques. Cuando lo descubrí, mi cabeza hizo un click y entendí porque todas esas historias para niños se desarrollan en el bosque: Hansel y Gretel, Caperucita roja, Blancanieves, La bella durmiente y todos esos cuentos llenos de misterios y contenidos sexuales. Tal vez es por ese misterio y esa sexualidad flotante en el aire es que las fiestas en los bosque de Bochum son tan especiales.

lunes, 21 de noviembre de 2016

Lo que ellas quieren.

Hay una película de Hollywood de finales de los noventa o principios del dos mil, cuyo nombre no recuerdo, que siempre me pareció una rareza: es la típica película para mujeres, pero desde el punto de vista de un hombre. El protagonista es Mel Gibson y por algún motivo (que me perdí porque estaba mirando la secuela de Robocop al mismo tiempo), Mel Gibson adquiere el poder de escuchar el pensamiento de las mujeres. Si hay una fantasía que puede excitar a un hombre, es ésta, la de saber lo que una mujer está pensando. Me parece que en el mismo nivel está el ser invisible, tal vez porque el hombre es un ser fisgón por naturaleza. Volviendo a la película, en un primer momento me imaginé que escuchar todo lo que las mujeres piensan debe ser genial. Aún más, creo que yo haría lo mismo que hizo el Señor Gibson: sería el hombre perfecto.

sábado, 5 de noviembre de 2016

El alemán que no entiende nada de fulbo.

Si no tenes ganas de leer, te lo leo yo: Click aquí

Yo vivo en Bochum, en un pequeño piso en las afueras de la ciudad. Hasta hace una semana vivía con Stefan y Lara, pero Stefan se ha mudado a otra ciudad por lo que fue reemplazado por Sabrina. Stefan es un chabón súper particular: entiende la modernidad, la disfruta y le da seguridad, pero también entiende que el mundo tal cual como lo conocemos ahora vuelve a la persona objeto de consumo y lo despersonaliza. Stefan acaba de terminar sus estudios en la Universidad en Geografía (lo que no sé es si eso lo convierte en un geógrafo, o geográfico, o profesor de geografía o licenciado en lo mismo). Antes de eso estudió filosofía, es un gran apasionado de la literatura, ciencia ficción y auto-didacta del modernismo, la evolución industrial, política, ciencia y actualidad. Si no menciono que escribió el guión para una serie de ciencia ficción que se terminó de rodar a mediados de este año y que es moderador en varios foros de opinión online, me quedo corto en la explicación de quién es Stefan. Es un tipazo, y una de las personas más inteligentes que he conocido: cuando da una opinión, la sabe defender con argumentos, libros y artículos, cuando desconoce un tema, sabe escuchar y observar y generalmente se pone a leer de tal forma que dos o tres semanas después lo conoce perfectamente.

miércoles, 2 de noviembre de 2016

Estados Unidos, Alemania, Rusia, Italia, Países Bajos, Irlanda, Argentina.

Si no tenés ganas de leer, te lo leo yo. Click aquí!

Siempre me gustó escribir, pero esto de escribir en un Blogg con cierta libertad y regularidad comenzó hace ya un par de semanas. Cuando me mudé a Alemania hace un año tenía la firme decisión de actualizar novedades de mi vida cada una o dos semanas, pero como muchas otras cosas que en mi vida comencé o quise comenzar, nunca puse la voluntad necesaria para que suceda. En los últimos meses estuve escuchando mucha radio, leyendo cuentos cortos y metiéndome en algunos bloggs, lo que me hizo descubrir que escribir no es algo que se deba hacer perfectamente bien. Bueno, a lo que quiero llegar es que, finalmente, estoy actualizando esto con la idea de darle algo de vida. Una de las herramientas de los bloggs que más curiosidad me produce, es una ventanita en la parte de estadísticas que te dice desde que países te leen, y los resultados son rarísimos.

martes, 1 de noviembre de 2016

Desde atrás de una pantalla (semi poesía)

La noches son terribles. La extraño. Extraño el calor que compartían nuestros cuerpos semidesmudos y abrazados. No podíamos dormir de otra forma. Nuestros brazos nos Buscaban, ciegos e implacables.